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Nat Simons en Cocodrilo Negro. Ponferrada

 



 

23.04.2023

 

Trato de escribir mientras recupero mis cinco sentidos porque el concierto de anoche en Ponferrada de Nat Simons y su banda me ha descolocado por completo.

 

Lo tienen todo: Canciones, voz, sonido y actitud. Me volaron la cabeza, pequeñas cosas del rockandroll como que se le desenchufe el micro en un par de canciones y se lo vuelva a conectar sin dudar, algún sonido extraño no deseado al que se adaptan y usan para llevar la canción de otra manera.

 

Batería Truth, bajo Hofner, teclado nord3, guitarras Yamaha (creo que Revstar), Squier (negra y dorada) y FranWood (verde alucinante)... me fijé en todo como buenamente pude, suenan como el puto rock and roll tiene que sonar, cada pieza tiene su sitio y todo junto suena como una sola pieza. ¿Me entiendes? Admiración por el trabajo bien hecho y llevado más allá, donde se juntan la vida y el arte. Parece sencillo pero aparte de esfuerzo y constancia y todo esto que he dicho hace falta tener algo que no sé muy bien bien qué es y allí parecía estar presente. Clases de rockandroll que diría Jaime Urrutia.

 

Me atreví a acercarme a que me firmase un disco y decirle algo que no sé muy bien qué porque estaba en otro mundo. Hablé algo con Nat y su hermana Helena, con Twwety, a Anxel también le pude agradecer el conciertazo, majísimos y buena onda. A Paul Rodas lo perdí del radar y a Laura no pude acercarme porque no sabía qué decir sin balbucear, tocó como si nada con una destreza tremenda, una esfinge egipcia dorada ahí encima del escenario y yo un simple humano que veía su aura miles de años después...

 

A esto lo llaman ser introvertido, yo lo llamo mierda porque no puedo hablar de manera natural con una persona que admire y quiera conocer sin parecer un bobo. Nunca me parece el momento... yo qué sé.

 

Por mi parte seguiré atento y trataré de seguir disfrutando y aprendiendo. Nat Simons y su banda me han descolocado y puesto en mi sitio, no sé cuál es pero sé que estoy, más cerca. Soy un idiota pero puedo vivir con ello, lo que no crea es que pueda vivir sin volver a verlos en directo.

 

Un abrazo.

 

Javi.

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